Puente de la Constitución en Madrid

Mi mujer y yo hemos pasado este puente de la Constitución en Madrid. Hemos ido a visitar a nuestros amigos Javi y Olivia y nos ha hecho especial ilusión volver a ver a Alejandro que ya muestra, a sus casi tres años de edad, un carácter abierto y sociable. También es la primera vez que viajamos en el A.V.E. a Madrid, y la verdad es que merece la pena por su rapidez, eficacia y mayor comodidad que el avión.

Han sido tres días que se han hecho muy cortos; sin embargo, no hemos parado de pasarlo bien y reirnos con Alejandro. Javi y Olivia nos han llevado a restaurantes como La Creperie-easycrep de la calle Díaz Porlier de Madrid, Los Pradillos de Perales de Tajuña, La Tinaja de Morata de Tajuña, La Fiorentina de la calle Jaime el Conquistador de Madrid, y el del acogedor salón-comedor del hotel Molino de Cantarranas en la localidad de Tielmes. Por cierto, en lo que a gastronomía se refiere, Javi y yo nos hemos quitado la mala espina del cochinillo que nos cenamos en Ávila hace unos años, porque el que asan en el Molino de Cantarranas está blandito y delicioso.

En cuanto a visitas turísticas, el tiempo limitado que teníamos y la climatología adversa no han querido que nos prodigáramos mucho; pero aun así, hemos ido a Chinchón donde no podéis dejar de visitar su espléndida y típica Plaza Mayor de Chinchón, o comprar alguna botella de Anís de Chinchón o algún dulce o sabrosos bollos como las Tetillas de Novicia. Y sino, acercaos a las Cuevas de los Vinos y veréis lo buenos que están los choricillos al infierno y los chatos de vino del país.

Para acabar nuestra excursión a Madrid, nuestros amigos nos llevaron a la Gran Exposición Mundial de los Tesoros Sumergidos de Egipto que está ubicada en el antiguo Matadero de Legazpi del Paseo de la Chopera, y que se ha prorrogado hasta el día 31 de diciembre de este año por el gran éxito que ha tenido.

Desde aquí, muchas gracias a Javi y Olivia por las atenciones que han tenido con nosotros; decirles que en todos los sitios a los que nos han llevado, hemos disfrutado muchísimo y que la comida ha sido abundante y de primera calidad. ¡Ojalá, nos volvamos a ver pronto y podáis conocer a Héctor! Hasta la próxima.