
Cómo sabéis, la bolsa es el barómetro indicador de la marcha de una economía. Pues bien, el IBEX-35 cayó un 7,54% el 21 de enero, el mayor descenso de su historia, por miedo a que la probable recesión estadounidense conduzca a una grave crisis mundial. Incluso, los economistas más veteranos recordaron, comparativamente hablando, el crack de 1929.
Al día siguiente, y para evitar una crisis en cascada, la Reserva Federal Americana rebaja 3/4 de punto porcentual el tipo de interés en el precio del dinero hasta dejarlo en el 3,50%. La reacción de los mercados internacionales no se hace esperar, orientándose al alza, y el IBEX-35 rebota el día 23 subiendo un 6,95%.
¿Qué está pasando? Pues que el sistema financiero norteamericano ha estado endeudándose excesivamente por la concesión masiva de hipotecas del tipo "subprime" o de alto riesgo. Su capacidad crediticia está menguando rápidamente y la buena marcha de una economía moderna depende de la existencia de crédito.
La economía de Estados Unidos vive en un constante miedo a la recesión, probable pero no segura. Por suerte, el resto de economías mundiales, y la española una de las que más, se encuentra en situación favorable; y hoy la economía mundial está muy globalizada por lo que ya no dependemos tanto de la economía estadounidense.
Esta volatilidad de las bolsas, ¿qué creéis, significa la entrada en una crisis, o la transición hacia una nueva etapa en la hegemonía económica mundial? En las culturas orientales la palabra crisis suele representarse por dos pictogramas; uno significa peligro y el otro oportunidad. Creo que habrán de tenerse en cuenta las emergentes economías y mercados asiáticos como China, La India, Hong-Kong, Taiwan y Thailandia.